Mandos de defensa del Kremlin arriban hasta 10 días antes de lo previsto, mientras que aliados de Kiev acusan que ese país envío más tropas a la frontera; EU alista apoyo estratégico para sacar a connacionales del riesgo

Nuevos movimientos militares de Rusia a Bielorrusia incrementan los temores de una posible estrategia contra Ucrania, por lo que aliados de Kiev no descartan reforzar el apoyo de efectivos y equipo y no descartar sacar a sus ciudadanos de esa región.

Con 10 días de anticipación a los ejercicios previstos a casi 200 kilómetros de la frontera con la zona amenazada, mandos del Ejército, como el jefe del Estado Mayor del Kremlin, Valery Gerasimov, se instalan en territorio vecino, lo que gobiernos de Occidente ven como un nuevo paso estratégico de Vladimir Putin contra Kiev, pues en las negociaciones no se ha concretado la desescalada.

Por el contrario, considera que con este traslado, que incluye al menos 30 mil soldados, Rusia desaira los peligros sólo para mostrar su poderío junto a un gobierno aliado como el de Alexander Lukashenko, líder que se ha mostrado dispuesto para mediar en favor de Putin, mientras se suman más voces para alcanzar los acuerdos que eviten una guerra o un desastre humanitario como anticipa Gran Bretaña.

En medio de los diálogos con Francia y Alemania, el gobierno de Putin muestra su poderío garantizando que realizarán uno de los ejercicios militares jamás vistos, sin entrar en detalles, pero empujando más la presión hacia las conversaciones, como la que tendrán hoy mismo en Berlín, como parte de la reactivación del Formato de Normandía.

En respuesta, el Kremlin atajó las preocupaciones por estos avances junto a Bielorrusia al reiterar que ese despliegue es temporal, pues retornarán al país a finales de mes, intentando calmar las alertas sobre una supuesta invasión que rivales sostienen es inminente.

Al respecto, la vocera de Exteriores del Kremlin, Maria Zajarova, rechazó las nuevas acusaciones occidentales al insistir que sólo se trata de una “instigación artificial” y horas después fuentes del Pentágono reportaron que a la par del arribo de líderes de Defensa a territorio bielorruso se intensificó el envío de tropas a la frontera con Ucrania, sin especificar cuántos soldados más movilizó.

En tanto, la funcionaria rusa dijo que esperan que las nuevas conversaciones, como las de hoy en Alemania, conduzcan a pasos firmes de una resolución, en la que insisten harán valer sus condiciones para evitar el crecimiento de Fuerzas Armadas de la nación vecina.

No obstante, ante estos movimientos y declaraciones, Ucrania no se queda con las manos cruzadas, pues comenzó simulacros para probar el equipo que ha recibido en las últimas semanas de parte de aliados como Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Y hasta adelantó que en los próximos días podría recibir mucho más refuerzo, sin detallar de qué se trata o desde qué naciones llegaría, lo que se suma a las declaraciones del primer ministro británico, Boris Johnson, quien alista el despliegue de hasta mil soldados en apoyo a Kiev, a unas horas de su viaje a la sede de la OTAN; también contempla duplicar la presencia de tropas en Estonia, en donde hasta el momento su Ejército apostó hasta unos 900 hombres.

Por separado, el ministro de Exteriores ruso, Dimitro Kuleba, aplaudió que sigan los esfuerzos por la desescalada, en la que no destacarán hasta recuperar Crimea. Puntualizó a medios que la estrategia que comenzó el presidente Volodimir Zelenski, se mantiene intacta con una diplomacia fuerte, un abanico de sanciones y el reforzamiento militar; por ello, llamó a gobiernos aliados a no soltar las negociaciones, pues cualquier alternativa es buena para alcanzar la estabilidad y seguridad regional.

No obstante, Kiev admitió que, aunque las amenaza no tiene precedentes, la situación sigue bajo control y hay signos de una posible desescalada sin adelantar plazos para lograrlo.

PREVÉN EVACUACIÓN

 Ante el riesgo de una invasión o ataque, EU ya alista un plan de apoyo a ciudadanos y aliados que queden atrapados en el conflicto.

Aunque hace unas semanas descartó una evacuación como la de Afganistán, medios estadounidenses revelaron que ya preparan una estrategia de apoyo, misma que podría concretarse a través de Polonia, región a la que recientemente envío dos mil efectivos al igual que a Alemania y Rumania.

Fuentes del gobierno detallaron que, sin necesidad de ingresar a Ucrania, soldados de la 82 División Aerotransportada realizarían dicha estrategia para ayudar a salir del país a connacionales, esto a unos días de que el presidente Joe Biden reiterara el llamado a sus ciudadanos a abandonar esta región, como lo han recomendado a quienes se encuentran actualmente en Bielorrusia y Rusia, debido a las constantes advertencias de una escalada, a fin de no quedar atrapados en un posible fuego cruzado.

Cabe destacar que previamente el mismo vocero del Pentágono, John Kirby, comentó que ese grupo se especializa en llevar a cabo “múltiples misiones”, y ayer advirtió que siguen las preocupaciones porque mientras países alertan sobre el reforzamiento ruso para presionar al aliado nuevamente trasladó a más militares a la zona.

“Vemos señales de que otros grupos tácticos están en camino”, sostuvo al reconocer que en vez de atenuar la crisis con las negociaciones sólo se elevan más las dudas sobre una desestabilización con el empuje de sus capacidades en materia militar.

Funte: La Razón de México