LeBron James, jugador de Los Lakers de Los Ángeles, mostró su frustración y su enfado con la NBA después de que un falso positivo por coronavirus le obligase a perderse la victoria de su equipo frente a los Kings de Sacramento por 117-92.
James regresó en la derrota del viernes (119-115) ante Los Clippers de Los Ángeles habiendo cumplido los protocolos covid-19 de la NBA después de que pruebas adicionales confirmaran que no era un caso positivo.
El cuatro veces MVP y campeón de la NBA, sin embargo, quedó frustrado por el proceso que le costó un partido y le causó «grandes inconvenientes», tras haber registrado una prueba positiva antes del partido del martes en Sacramento.
Bastante confundido, frustrado, enfadado por no poder hacer nada«, dijo James en la conferencia de prensa posterior al partido. LeBron, de 36 años, explicó que su malestar fue debido a un aislamiento inmediato en lugar de poder realizar un test adicional para confirmar su estado.
«Por lo general, cuando tienes una prueba positiva, lo examinan de inmediato para asegurarse», dijo James. «No hubo una prueba de seguimiento después de mi prueba positiva. Fue directamente en aislamiento y te pusieron en un protocolo. Esa fue la parte que me enfureció«, admitió.
«Tuve que encontrar una manera de regresar de Sacramento yo solo, sin seguridad, sin nadie. Tuve que poner a mis hijos en aislamiento por el momento. La gente en mi casa en aislamiento. Fue un gran inconveniente. Esa fue la parte de la ira«, manifestó el jugador de los Lakers.
James añadió que siempre supo que no era positivo por covid-19, que no tenía síntomas, lo que alimentaba aún más su frustración en el proceso. «Sabía que me iban a ‘liberar’«, dijo. «Nunca me sentí mal en absoluto. Sé que puedes estar asintomático, pero si lo que tuve fue una prueba de covid positiva, ¿qué estamos haciendo? ¿De qué estamos hablando?», se preguntó
«Pensé que se manejó muy mal todo este asunto. Poder obtener el visto bueno fue un soplo de aire fresco para mí, mi familia y mis amigos», sentenció LeBron James, que no ha podido jugar cuatro partidos consecutivos esta temporada debido a una variedad de problemas que incluyen lesiones en el tobillo y el abdomen junto con una suspensión y su prueba de falso positivo.
El alero de los Lakers, quien regresó con 23 puntos, 11 rebotes y seis asistencias ante los Clippers, ha jugado 11 partidos esta temporada, promediando 25,8 puntos, 5,2 rebotes y 6,8 asistencias. Los Lakers tienen un balance de 12-12 tras la derrota del viernes.
Fuente: Excelsior