La nueva variante del COVID19 nombrada por la OMS como Omicron ha puesto en alerta al mundo en un momento donde ya había signos de preocupación. ¿Nos acercamos a un nuevo cierre de actividades?
Casi dos años después del primer caso de COVID19 registrado en China, el mundo ha entrado en un momento de preocupación que, ahora, se agrava con la llegada de una variante del SARS COV2 denominada por la Organización Mundial de la Salud como Omicron, y que en un lapso de 72 horas ha reavivado temores que parecían olvidados.
Omicron ha sido clasificada por la Organización Mundial de la Salud como una variante “preocupante” a través de un comunicado de la institución emitido el viernes, y se convierte en la quinta en recibir esta denominación desde que inició la pandemia. La clasificación es la más alta que se otorga en cuanto a la preocupación que genera para el organismo sanitario y su riesgo de propagación.
La variante fue detectada por primera ocasión, según reportes, el pasado 24 de noviembre con casos en Sudáfrica, pero sus antecedentes datan de la B.1.1.529 con presencia en naciones de Europa, Medio Oriente y Asía como Bélgica, Israel, Hong Kong y su expansión a otros territorios africanos como Botswana, con el primer caso registrado el pasado 9 de noviembre.
¿Por qué preocupa a la OMS Omicron?
Según el mismo reporte del organismo la clave de la alerta es que “esta variante presenta un gran número de mutaciones, algunas de las cuales son preocupantes. Las pruebas preliminares sugieren un mayor riesgo de reinfección con esta variante, en comparación con otras”.
A esto se suma la rapidez con la parece expandirse y afirman que “se ha detectado a un ritmo más rápido que los anteriores aumentos de la infección, lo que sugiere que esta variante puede tener una ventaja de crecimiento”.
La situación ha llevado a que de inmediato los 27 estados que conforman la Unión Europea, Reino Unido, Israel, Canadá, Estados Unidos impongan controles fronterizos más estrictos a los vuelos provenientes de África, con algunas de esas naciones cerrando ya el paso.
¿Qué es una variante?
Si bien las alertas se han disparado a nivel mundial, desde que la pandemia por COVID19 inició a principios de 2020 se esperaban la presencia de variantes, un proceso natural en esta situación.
Una variante es una mutación del virus original, en este caso el SARS COV2. Adquieren esta denominación cuando ya han existido más de dos mutaciones de la cadena original.
La variante sudafricana presenta 50 mutaciones y la mayoría de ellas están enfocadas en la proteína de la espiga que permite al virus adherirse a las células humanas.
¿Cuántas variantes monitorea la OMS?
La OMS monitorea actualmente más de 10 diferentes variantes que comenzaron a presentarse desde mediados de 2020, con cinco de ellas clasificadas como preocupantes.
Delta fue la primera reconocida bajo esta denominación en la India a mediados del año pasado. A ella le siguieron Alpha y Beta, con los primeros casos registrados a mediados de septiembre de 2020 en Reino Unidos y Sudáfrica. Gamma fue la siguiente en aparecer en Brasil a finales del año pasado. Omicron es la más reciente de todas.
Pero de estas cinco, solo Delta y Omicron han sido reconocidas por su alta tasa de contagio, algo que no se observaba en Alpha, Beta y Gamma.
A esta clasificación se suman las variantes de “interés”, que podrían generar una transmisión comunitaria significativa o con riesgos que podrían generar un impacto para la salud mundial. En este rubro solo existen dos: Lambda y Mu, con sus primeros focos en Perú y Colombia.
Pero no todas las variantes mantienen en estado de vigilancia por parte de la OMS. Existe una última clasificación denominada “Variantes anteriormente controladas”, donde se encuentran modificaciones del virus que ya no circulan a niveles de importancia en salud pública o que no crean un mayor riesgo de contagio o enfermedad que la ya presentadas por el virus original. En este listado figuran 13 variantes con surgimiento en países como Rusia, Reino Unido, Estados Unidos, Indonesia, Brasil, entre otros.
¿Sirven las vacunas actuales del COVID contra Omicron?
Diversos laboratorios desarrollaron en tiempo récord una vacuna contra el COVID19. Si bien al principio del proceso existía un desabasto y una exigencia por obtener el preciado líquido, las cifras han ido en aumento gracias a las diferentes opciones en el mercado para cada una de las naciones.
Se estima que en este momento hay 3,333,599,000 personas en el mundo completamente vacunadas, lo que representaría un 40 por ciento de la población global, con un importante número de naciones con arriba del 50 por ciento de su población vacunadas, con México formando parte de este grupo.
Tan pronto se dio a conocer la noticia de la preocupación de la OMS por la nueva variante, algunos de los laboratorios encargados de la producción de las vacunas se pronunciaron al respecto. Pfizer-BioNTech advirtió que tendría la capacidad de modificar su fórmula en 100 días para hacer frente a la nueva variante, siempre que sea resistente a la composición actualmente existente para lo cual han iniciado un estudio en laboratorio del cual esperan resultados en dos semanas.
Johnson & Johnson también informó que comenzó los análisis para conocer la resistencia de la variante ante su vacuna.
Astra Zeneca, una de las primeras presentes a nivel mundial, señaló a Reuters que ya investigan en Bitswana y Eswatini para recopilar datos que les sirvan para determinar la eficacia de su cóctel.
«También estamos probando nuestra combinación de anticuerpos de acción prolongada AZD7442 contra esta nueva variante y tenemos la esperanza de que AZD7442 mantendrá la eficacia, ya que comprende dos potentes anticuerpos con actividades diferentes y complementarias contra el virus».
Moderna informó que desarrollará refuerzos para las variantes “preocupantes” de la OMS con el objetivo de ofrecer una mayor protección a las personas que ya fueron inmunizadas anteriormente.
Desde el principio, hemos dicho que mientras buscamos derrotar la pandemia, es imperativo que seamos proactivos a medida que el virus evoluciona», dijo el CEO de Moderna, Stephane Bancel, en un comunicado ante los cuestionamientos si su vacuna sería funcional ante Omicron.
«Las mutaciones de la variante Omicron son preocupantes y, desde hace varios días, nos estamos moviendo lo más rápido posible para ejecutar nuestra estrategia para hacer frente a esta variante».
¿Es el peor momento para la aparición de esta variante?
Algunos especialistas habían advertido que aunque la vacunación avanzaba satisfactoriamente, el invierno podría traer un rebrote importante en el final del año. Las peores predicciones se han cumplido en algunos países donde las restricciones están de vuelta ya sea porque los contagios se han disparado o las alarmas comienzan a sonar.
Alemania ha calificado la nueva ola de contagios como “más grave que en cualquier otro momento de la pandemia”, según palabras de su ministro de salud, Jens Spahn, esto cuando el pasado 25 de noviembre la nación europea registró más de 74 mil casos nuevos en una jornada.
La situación es tal que existe una saturación en algunos hospitales en la zona sur del país y ha obligado a pedir ayuda del ejercito para trasladar pacientes a otras zonas donde se cuente con camas de cuidado intensivo disponibles.
La Luftwaffe, nombre con el que se conoce al ejército de ese país, ha utilizado su UCI voladora, un Airbus A310 MedEvac, capaz de trasladar a seis personas con todo el equipamiento de una unidad de terapía intensiva, según reportes de la DW, quien también afirmó que un avión de reconocimiento A319OH ha sido equipado con lo necesario y está listo en la base de Colonia.
Portugal, el país con mayor índice de vacunados de la Unión Europea, decretó un estado de “calamidad” e impuso test y registro obligatorio para acceder a algunos lugares. Además, la primera semana del 2022 será de confinamiento y el trabajo a distancia será obligatorio, esto para reducir el riesgo de contagio después de las reuniones por las fiestas decembrinas.
Países Bajos también ha tomado medidas “drásticas” para tratar de frenar una nueva ola de contagios y durante las próximas tres semanas todo comercio no esencial como restaurantes y cafeterías, deberán cerrar desde las 17 horas. Los supermercados no se han salvado y tendrán que bajar las cortinas a las ocho de la noche en un momento donde en el país los contagios rondan los 20 mil nuevos casos diarios.
En otras naciones como en Estados Unidos no hay planes de restricciones por ahora y mantendrán la apertura de sus negocios, algunos de los cuales no tienen ni seis meses de recibir a clientes en números cercanos antes de la pandemia, como por ejemplo los recintos deportivos o los teatros en Broadway.
¿Qué efectos tiene la variante Omicron en la economía?
Los mercados mundiales han sido los primeros contagiados por la nueva variante con una reacción negativa ante el temor de que la variante africana pueda llevar a un nuevo cierre en diversas naciones del mundo como el ya visto a principios de esta pandemia.
Los principales índices accionarios de los Estados Unidos mostraron caídas importantes que no se veían desde febrero.
En la economía mexicana el dólar tuvo un incremento de hasta 30 centavos en su venta al público alcanzando los 22 pesos por billete verde en algunas instituciones bancarías, mientras que, a nivel global, los precios del petróleo se desplomaron en promedio 10 dólares por barril ante el temor de un nuevo cierre y que, con ello, se reduzca la demanda.
La situación llevó a que las acciones de importantes grupos petroleros como Exxon y Chevron cayeran hasta el tres por ciento en el valor de sus acciones.
Este cambio de precio significa un revés a las predicciones de que el barril podría alcanzar los 100 dólares por unidad ante los incrementos que se había visto en los últimos meses.
Las aerolíneas también padecieron un golpe ante las restricciones de viaje impuestas para algunas naciones africanas, pero también por el temor de que estás puedan ampliarse en el periodo navideño. United Airlines cayó un 9.6 por ciento en sus acciones, mientras que American Airlines perdió 8.8 por ciento. Las cifras de pérdida de valor por papeleta se sintieron más en las compañías de cruceros donde los dos dígitos fueron la norma.
«El COVID había quedado aparentemente en el espejo retrovisor de los mercados financieros hasta hace poco», dijo Douglas Porter, economista jefe de BMO Capital Markets en declaraciones recogidas por USA Today y advierte que los efectos económicos se sentirán aún en 2022.
«Como mínimo, es probable que (el virus) siga arrojando arena en los engranajes de la economía mundial en 2022, frenando la recuperación (y) manteniendo las torceduras en la cadena de suministro».
Los operadores turísticos a nivel global esperaban recuperar cifras importantes en la primera navidad y año nuevo con “normalidad” después de la ausencia de celebraciones multitudinarias en 2020.
El impacto no solo ha sido en las grandes cadenas. Las restricciones en algunos países europeos ya afectan a restauranteros y a los tradicionales mercados navideños que se han visto impedidos de abrir en una época que, para ellos, representa más del 50 por ciento de sus ganancias.
Todos estos problemas se suman a la crisis de las materias primas, escases de contenedores y de semiconductores que han llevado al incremento de productos básicos y tecnológicos.
Omicron se vuelve así un nuevo reto a vencer para la salud y la economía mundial.